Hay cinco estilos de amor diferentes que suelen estar determinados por nuestra infancia: el evasivo, el indeciso, el controlador, el complaciente y la víctima. Cuando se trata de relaciones afectivas, cada uno tiene su propia manera de demostrar su amor. Pero a veces, estos comportamientos y actitudes pueden ser más negativos que positivos.

Según estudios científicos, los niños que tuvieron una relación segura con sus padres mientras crecían tienden a tener mejores relaciones interpersonales más adelante, mientras que los niños que tuvieron relaciones más inestables resultan más propensos a tener comportamientos poco saludables y cierta inestabilidad en sus relaciones.

Por todo ello, en este vídeo averiguarás qué dice tu forma de amar sobre tu infancia.