Un desafío frecuente en los niños y niñas dentro del espectro autista consiste en tolerar la demora para acceder a objetos, juegos u otras actividades de su preferencia.

Ante la falta de otras herramientas, muchas veces los padres limitan las oportunidades en que brindan acceso a las preferencias de su hijo para así evitar conflictos, una estrategia sencilla pero que puede deteriorar su relación ellos.